Once Upon a Time in Wonderland

Érase una vez en el País de las Maravillas es un spin off de la serie Érase una vez, donde se narraba la historia de personajes de cuentos como si vivieran en la vida real. Once Upon a Time in Wonderland se la recomiendo a personas a las que les guste Érase una vez, pero también Alicia en el País de las Maravillas, y que no se canse de una historia un tanto empalagosa.

Alicia es una joven internada en un psiquiátrico por creer en un mundo de fantasía en el que los animales hablan, la magia existe, y su gran amor es el genio de la lámpara. Con tan solo una temporada de duración, a través de 13 capítulos Alicia intentará encontrar a Cyrus, el genio del que se enamora.

La historia de amor entre los dos personajes puede llegar a ser cansina y empalagosa en algunas ocasiones, pero es el móvil que mueve a Alicia para vengarse de la Reina de Corazones (interpretada por una actriz demasiado guapa y que no convence como mala). Acompañada de un interesante personaje, la Sota de Corazones, buscarán a Cyrus por el País de las Maravillas.

La trama comienza a ponerse interesante cuando aparece Jafar (el actor que interpreta a Sayid en Perdidos, que lleva a cabo una magnífica actuación del villano de Aladín), quien quiere reunir a tres genios para cambiar las leyes de la magia.

La serie me gustó, pero porque me encanta Alicia en el País de las Maravillas, y lo cierto es que la serie no tiene nada que ver con la historia de los libros ni de la película de Disney. Me hubiera gustado que tuviera más nexos de unión con Érase una vez.

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