Modern love, una oda al amor

Con tan solo 8 capítulos con varias parejas protagonistas, Modern Love ha conseguido emocionarme de una manera u otra. El amor es el eje principal de esta serie, no siempre en su visión romántica, sino en la de preocuparse por los demás.

Aunque puedan parecer capítulos sueltos que puedes ver en cualquier orden, lo mejor es siempre dejarse el último para el final, sin alterar nada y para que todo cobre sentido. 

Así, al principio nos encontramos con una madre soltera y su portero, con dos parejas que se reencuentran años después, con una mujer con trastornos psicológicos, con un amor paternal, con un matrimonio que va a terapia, una pareja que parece imposible, con una pareja que quiere adoptar y con una que se forma en la vejez. Todas ellas son historias tan simples pero tan bonitas y reales que es imposible no simpatizar con ellas. 

La delicadeza que rodea a toda la serie, al igual que la pureza e inocencia del amor son lo que la define, lejos de ser cursi, estereotipada o previsible. Es por eso que me ha gustado y emocionado tanto y por lo que la recomiendo (disponible en Prime Video).