Friends

Para mí, la mejor serie que he visto, sin ninguna duda. 10 temporadas que mantienen el nivel, sin apenas altibajos, haciendo que te rías con cada capítulo.

Es la típica serie que puedes continuar viendo una década después de que hayan emitido el último capítulo, que puedes seguir riéndote con las situaciones que has visto una y otra vez. Porque sin duda esa es una de sus características: nunca te cansas de verla.

La serie cuenta la vida de seis amigos que viven en Nueva York. Son jóvenes, divertidos, y comparten pisos entre ellos. Por supuesto, sin la típica relación entre amigos, esta serie no sería nada.

El eterno quiero y no puedo de Ross y Rachel mantiene en vilo temporada tras temporada. No cansa ni es repetitivo, porque es algo que podría darse perfectamente en la vida normal de cualquiera de nosotros.

Y Chandler y Monica, otra pareja entre amigos, pero nada equiparable a la relación entre Ross y Rachel. Hermanos y mejores amigos de unos y otros que acaban juntos. Parece que en estas historias no caben Joey y Phoebe. ¡Mentira! Friends no sería nada sin estos dos 'tontitos': Joey por su ignorancia infantil y Phoebe por su extravagancia. Juntos, los seis, forman un combo estupendo que se complementa a la perfección.

Tiene tantos, tantísimos capítulos memorables que no sabría escoger uno. Puede que me quedara con 'Unagi'. Aunque el de el armadillo navideño también es buenísimo. Pero el de la ronda relámpago, en el que se intercambian los pisos...Muy, muy bueno. Pero realmente memorable es el capítulo de "He bajado del avión". Cada vez que veo a Rachel en la puerta viendo como Ross le grita al contestador se me pone la piel de gallina.

En definitiva, Friends será siempre mi serie favorita.