Star Wars: Los últimos Jedi

Mi primera reacción nada más levantarme de la butaca tras ver el último episodio de Star Wars fue: 'Es un poco rara, pero me ha gustado'. Los últimos Jedi, a pesar de repetir estructuras y rendir homenajes a la primera trilogía, utiliza componentes nunca vistos en la saga hasta ahora y que funcionan de maravilla.

Por fin, tras dos años de espera, sabemos qué sucede cuando Rey le entrega la espada láser a su legítimo dueño, Luke Skywalker. El Episodio VIII de Star Wars comienza tras el desenlace de El despertar de la Fuerza, con los rebeldes tratando de huir de la Primera Orden y con la joven aspirante a jedi reencontrándose con 'la leyenda'.

En lugar de hacer un resumen o comentario de la película, he preferido destacar algunos puntos (8, concretamente), con spoilers:

1. STAR WARS: esta película exige verla en la gran pantalla. Ese momento en el que aparecen los créditos iniciales y suena la mítica música de John Williams, si eres fan, te pone los pelos de punta.

2. LEIA: la difunta Carrie Fisher da vida por última a vez a la Comandante Leia Organa en el Episodio VIII, y la forma de rendirle tributo no podía ser mejor. El primer plano que tenemos de ella es de espaldas, y ya solo con esa imagen su presencia impone. Sin embargo, el momento en el que está flotando medio muerta en el espacio, y logra volver a la nave, es un poco surrealista. Leia nunca había utilizado sus escasos poderes hasta ahora, y lo hace de una manera casi heroica por salvar su vida. Por otro lado, el ya nostálgico holograma 'Ayúdame Obi Wan Kenobi, eres mi única esperanza' reaparece en la película con el mismo motivo: obligar a un jedi retirado a involucrarse de nuevo en la lucha. Un tierno y emotivo homenaje a la eterna Princesa Leia.

3. C3PO, R2D2 y los Porg: juegan un papel bastante intrascendente durante toda la película, pero la presencia de los droides es casi obligada por tratarse del universo de Star Wars. Han aparecido en todas las entregas, y la octava no iba a ser menos, aunque su papel no tenga ninguna relevancia en la trama. Por otro lado, los Porg, esos animales entrañables que se encuentran en la isla donde está Luke, tampoco pintan absolutamente nada en la historia, pero resultan adorables y graciosos.

4. REY Y KYLO REN: son los verdaderos protagonistas de la película, una nueva generación que tomará el relevo de Luke y Darth Vader como representantes de la lucha entre la luz y la oscuridad. Kylo, ya desprovisto de su casco, crece como antagonista de la trama y se convierte en el villano que la nueva película de Star Wars necesitaba. Provoca, como en El retorno del Jedi, la muerte de su mentor y tiene un conflicto interno en un momento clave. Rey, por su parte, se enfrenta a sus propios miedos e identidad, empeñada en saber la verdad y quiénes son sus padres. La determinación de traer a la luz a Kylo es la misma que tenía Luke con su padre, pero esa conexión entre ambos, esas escenas en las que hablan entre ellos, son simplemente brillantes y uno de los elementos no utilizados hasta el momento, al menos no a ese nivel.

5. LUKE SKYWALKER: el maestro jedi se ha recluido en una isla remota donde se encuentran los orígenes de los primeros caballeros jedi. A pesar de los esfuerzos de Rey, ésta no consigue que le acompañe a la batalla contra la Primera Orden. Vemos a un Luke que nada tiene que ver con el de la primera trilogía. Además de viejo, ha perdido toda esperanza y cree que los jedi deben desaparecer. Se ha convertido en leyenda (como el propio Mark Hamill) a pesar de no sentirse como tal. Y aún así, tiene un momento espectacular con un enfrentamiento con su sobrino en el que parece inmortal...porque en realidad no se encuentra en el campo de batalla. La forma de despedirse del personaje, con los dos soles de fondo y ese fundido, son el homenaje perfecto a la saga de George Lucas.

6. YODA: ¡sí, vuelve Yoda! Uno de los mejores personajes de Star Wars vuelve a modo de espíritu para reencontrarse con su antiguo aprendiz. Y no es el Yoda de la segunda trilogía, sino el de cuando Luke y él entrenan. Ese Yoda gracioso, reflexivo y un poco tocapelotas que hace que te des cuenta de que tienes que hacer lo correcto, por mucho que te cueste. No obstante, la primera impresión que me causó su aparición fue de rechazo, más que nada por su apariencia, que luego mejora.

7. Las batallas: como en toda película de Star Wars, las batallas en el espacio tienen una gran importancia. En esta ocasión, empiezan bien fuerte, con los rebeldes perdiendo estrepitosamente. Si hay que destacar un momento, sería el de cuando la última gran nave de la República traspasa a la velocidad de la luz la nave enemiga, partiéndola por la mitad en un silencio absoluto. Tremendo momento que tiene su réplica cuando Kylo Ren parte la espada láser de Rey. Por otra parte, la sal roja del último planeta donde se libra la gran batalla final, también es digno de mención. Ese color rojo que caracteriza al cartel de la película y que en cierto momento parece sangre, es brutal.

8. El final: el desenlace me dejó un poco descolocada. Creía que iba a terminar con ese plano que reúne a todos los rebeldes que quedan en el Halcón Milenario. Sin embargo, vemos a unos niños que parecen ser el futuro de la República...y de la Fuerza. ¿Qué camino seguirá el Episodio IX sin Leia y con tan pocos rebeldes? Es, de nuevo, responsabilidad de J.J. Abrams.