Los Descendientes

Larga, lenta y aburrida. Al menos esa fue mi impresión durante la hora y pico que dura la película. No entiendo cómo pudo estar nominada al Oscar ni ganar uno al mejor guión. No sé si es la historia en sí, la ambientación, o todo en su conjunto. La terminé de ver por saber qué pasaba, pero no la recomiendo. Simplemente es mi opinión, habrá gente a la que le haya gustado.

George Clooney es Matt King, un padre de familia que ve cómo su esposa entra en coma tras un accidente en una lancha. Ahora tendrá que hacerse cargo de sus dos hijas de 10 y 17 años. Además también tiene que decidir a quién vende parte de una de las islas de Hawaii que ha pertenecido a su familia durante décadas.

La película es un drama. El protagonista ve que no es capaz de criar a sus dos hijas, aunque sorprendentemente se entiende muy bien con la adolescente, que le ayudará a buscar al amante de su mujer. Porque la película gira, en su mayoría, a que la mujer le engañaba y a que como está en coma hay que tomar decisiones rápidas y difíciles.

No soy muy fan de la música hawaiana, que está presente durante toda la película. Además tiene un tinte grisáceo que no cuadra muy bien con la imagen mental que tenía de Hawaii. Pero bueno, en general la película me aburrió porque sentía que no pasaba nada; que Clooney era un personaje insulso y sin vida que no sabe muy bien qué hacer (aparte del momento en el que le grita a su mujer en coma en el hospital). Tampoco entiendo muy bien qué pinta el chico que va con Alexandra, la hija de 17 años. Se podría prescindir de él perfectamente. 

Las camisas hawaianas no son lo mío, y esta película tampoco.