Marte

No sé qué extraña afición tiene Ridley Scott con el espacio. Cuando vi Prometheus me quedé loca y salí del cine confusa y disgustada. Sin embargo, cuando vi Alien pensé "menudo bicho tan asqueroso", pero oye, la tensión estaba bien servida. Y con Marte no sé que ha pasado, que es mucho más realista. No salen marcianos ni aliens, curiosamente. El planeta sigue siendo aquel desierto que conocemos actualmente, con la novedad de que por fin una tripulación ha podido viajar hasta él y que han dejado a un astronauta allí solo.

Éste, interpretado por Matt Damon, tendrá que vérselas para sobrevivir en un planeta en el que no crece nada y en el que se tarda en llegar 4 años. Sorprendentemente, los tipos de la NASA no se olvidan de él y tratan de devolverle a la Tierra.

Cuando digo que Marte es más realista quiero decir que no crea un mundo imaginario en el que hay seres extraños que se comen a los humanos, ni saltos en el tiempo que te llevan de planeta a planeta (no he sido capaz aún de ver Interestellar). Lo que ha creado Scott con esta película es una historia que puede llegar a resultar creíble excepto por los detalles de que el protagonista es capaz de cultivar patatas, no se pone enfermo ni se vuelve loco, tiene agua suficiente, y además es capaz de descubrir un aparato que llegó al planeta en los años 90 y comunicarse con la Tierra. Bueno, y también la nave en la que viajan sus compañeros, que es un poco futurista, al estilo Star Trek, con gimnasio y todo. 

En cuanto al resto, la historia narra los conflictos que se dan entre los miembros de la NASA, la opinión pública y los sentimientos de sus propios compañeros, lo que añade el toque humano y realista. Se echa un poco en falta el paso del tiempo. Es decir, al principio se detallan los meses que lleva Mark en Marte, pero hay un momento en el que este detalle se olvida.

La película en general es un poco lenta pero cuando consigue arrancar te engancha. Visualmente está muy bien construida, aunque hay una parte del final que es de guasa. De hecho me recuerda a cuando en Armageddon despliegan unas alas que reflejan la luz del sol para quemar al asteroide como una de las opciones. De coña. Tiene algunos momentos de bajón con tantas discusiones en la NASA, pero por lo menos Sean Bean no muere en esta película.

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