Fiestas populares, ¿tradición o propaganda?

El día 15 de mayo es el día de San Isidro en Madrid. Chulapos y chulapas se reúnen en la Pradera de San Isidro para disfrutar de la fiesta popular en la que se celebra el día del patrón de la ciudad madrileña. Este año se celebrará desde el día 14 hasta el 18 de mayo. Tendrán lugar varios conciertos en distintos puntos de la capital, como la Plaza Mayor o el Parque del Retiro. También se podrán ver pasacalles y trotamundis por las calles de Madrid.

En este día de conmemoración de la ciudad, los más mayores bailan el chotis vestidos de chulapos, los más pequeños comen churros con chocolate, y los jóvenes beben en la Pradera de San Isidro. Es una tradición popular que se espera con deseo para disfrutar del buen tiempo y mostrar el carácter madrileño.

En mi opinión, esta fiesta popular local tiene poco o nada de propaganda, y mucho de tradición. Aunque las fiestas estén pagadas con dinero público procedente del Ayuntamiento de Madrid, se trata de festejar el patrón de la ciudad. En todos los lugares tienen fiestas similares a estas en las que todo el mundo disfruta y en las que no se cuestiona la procedencia del dinero. De hecho, se mantiene el presupuesto de 2013, y se ha logrado aumentar el número de actuaciones con respecto al año anterior.

Siendo Madrid la capital creo que no hace falta recurrir a la propaganda política para intentar "vender" la ciudad, porque en sí misma ya es un recurso socorrido turísticamente. La Feria de San Isidro también invita a conocer el mundo de los toros (algo con lo que estoy completamente en contra y no me gusta que se identifique a España con las corridas de toros). No obstante, para los más veteranos, es tal vez lo más espectacular de las jornadas.

En definitiva, la festividad de San Isidro es una tradición propia y característica de Madrid, y en ningún caso creo que se utilice como propaganda política, ya que es algo que pertenece a los madrileños y que no puede usarse como instrumento político.

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