Inside job

No seré una experta economista, pero este documental te hace reflexionar e indignarte con la situación actual. La proyección Inside Job explica detalladamente la crisis que empezó en 2008 en Estados Unidos y que se expandió al resto del mundo. Un mundo interconectado y dependiente económicamente.
Es indignante ver cómo los banqueros pasaron las hipotecas de las familias a los inversores para que "jugaran con dinero" que no era suyo, y que ahora sean esas personas las desahuciadas por los negocios hechos por otros. La revalorización de la vivienda tuvo también mucho que ver en esto. Y esas figuras, los especuladores, que trapichean con dinero que no es suyo y que se benefician cuando hay gente que pierde sus propiedades.

¿En qué momento los bancos, esas identidades financieras sin alma, deciden beneficiarse de los ingresos de sus clientes, haciendo que éstos pierdan todo mientras ellos obtienen cada vez más? Lo más irónico de todo es que al declararse en bancarrota, el gobierno aboga por rescatar al banco y no a la persona que no tiene nada. Lleva a cabo medidas destinadas a desfavorecer a los trabajadores, familias, estudiantes, etc., mientras que no hacen apenas nada para regular las actividades de los bancos.
Esos tiburones de Wall Street son los que han salido mejor parados de todo esto. Se pueden ir de su puesto de trabajo con una indemnización de millones al mismo tiempo que una familia tiene que acudir a un sitio que les ayude a mantenerse dándoles alimentos. Es totalmente indignante. Gracias a este documental comprendo mejor porqué hubo gente acampando en Wall Street.

Porque los medios de comunicación no llegan al fondo de la cuestión. Te presentan la noticia y ahí se queda. Los que se manifiestan son observados como radicales y soplagaitas, pero no explican al ciudadano de forma detallada porqué hacen eso. Qué ha causado ese malestar, esa indignación, esa injusticia. Tiene que ser el individuo el que busque por su cuenta una explicación a la situación a la que se ha llegado y si es valiente, salir a denunciarlo.
Y eso también lleva a hablar del ya denominado 15M. Gracias a este documental entiendo mucho mejor los carteles que pude ver en Sol. Hay poca gente que se informa, investiga y averigua lo que está pasando, ya que los responsables de hacerlo [los medios de comunicación] no hacen correctamente su labor. Al menos yo no he visto que sea así.


Se siguen aceptando e interiorizando unas medidas y unas reformas que no castigan a quienes deben pagar por lo que han hecho. Esto no se soluciona con una huelga general ni unas acampadas. Hace falta cambiar el modelo y el sistema, tarea casi imposible y realmente difícil de creer y de hacer. Sin embargo,  mientras haya unos pocos que defiendan esto, tengo una mínima esperanza de que haya un futuro mejor.

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